La Capilla Sixtina

«Santuario de la teología del cuerpo humano» (Juan Pablo II)

Ezechias

(adprehendens dominum uel fortitudo domini: quien toma al Señor o fortaleza del Señor)

2 Re 18, 1-2: “El año tercero de Oseas, hijo de Elá, rey de Israel, comenzó a reinar Ezequías, hijo de Acaz, rey de Judá. Tenía veinticinco años cuando subió al trono, y reinó veintinueve años en Jerusalén. Su madre se llamaba Abi, y era hija de Zacarías.”

El espacio en primer plano está ocupado por la figura de una mujer sentada, vestida de verde, con los cabellos recogidos en una larga trenza alrededor de la cabeza. Es la madre de Ezequías, el muchacho en segundo plano, que parece vigilar el sueño de su anciano padre, Acaz. Esta actitud podría ser una prefiguración de la protección que Ezequías, ya adulto y convertido en rey de Israel, ejercerá sobre Jerusalén contra los asirios.

Otros autores reconocen en la mujer vestida de blanco y verde a Jefsí-bah, madre de Manasés (2 R21, 1). El profeta Isaías, pintado por Miguel ángel junto a esta enjuta, fue enviado por Dios con cierta frecuen­cia a que le llevara mensajes al rey Ezequías.

La Biblia habla de Ezequías como de un buen rey que ordenó la destrucción de los monumentos erigidos a la idolatría tanto en Judá como en otros lugares.

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