Las pechinas y su relación con la historia de Israel *
El tema unificador de las cuatro pechinas es la representación de cuatro importantes salvaciones del pueblo judío en momentos en que parecía estar condenado a la desaparición. En la pared oriental, en dirección a Tierra Santa, se encuentran las dos salvaciones que tienen lugar en Israel. En la pared occidental, alejada de Israel, están las dos historias que tienen lugar en Persia y en el campo, lejos de la Tierra Prometida.
Dios aparece salvando a su pueblo tanto a través de personajes masculinos como femeninos. Para el Talmud, Dios es tanto varón como hembra expresando así las características de Alguien que esun Dios de la Justicia pero que también es el Dios de la Piedad. La fuerza masculina combinada con la compasión maternal compone el equilibrio perfecto sin el cual la regla divina no puede funcionar.
El midrash y los rabinos vinculan ya desde antiguo estas historias. En el Deuteronomio, 26, 8, Moisés recuerda a los judíos que salieron de Egipto gracias a «una mano fuerte, un brazo extendido, con gran miedo, y con señales y milagros». Estas cuatro accionestiene que ver con las cuatro copas del Seder Pascual.
Con una mano fuerte: El midrash destaca que en el Libro de Judit, esta heroína judía reza con fervor «Concédeme, aun siendo sólo una viuda, una mano fuerte para cumplir con mi plan» (Judit, 9, 9).
Un brazo extendido: Los rabinos judíos identifican este brazo con la espada de David. En la Càbala, la fuerza es la esfera de Gevurah, simbolizada por la letra hebrea gimel. En hebreo, guimel sifnifica dar tanto una recompensa como un castigo. Si se observa el perfil de la imagen vertical constituida por la espada, la figura de David, y la V invertida que forman la cabeza y los brazos de Goliat, veremos la forma de esta letra hebrea, que proporciona la fuerza al brazo extendido del chico.
Con gran miedo: Estas palabras prefiguran la historia de Ester. En primer lugar, dice el Talmud que el miedo al plan genocida de Amán recondujo a más judíos hacía el camino de la fe que todos los profetas juntos. En segundo lugar, cuando Ester acaba revelando al rey persa que alguien pretende matarla a ella y a todo su pueblo,«Entonces Amán tuvo miedo ante el rey y la reina». Finalmente, el Libro de Ester repite tres veces que los persas paganos tenían miedo de los judíos.
Con señales y milagros: hace referencia a la vara de Moisés, tal y como Dios le dijo a Moisés: «Y tomarás en tu mano esta vara, con la cual harás señales».(Éxodo 4, 17) En la pechina de La serpiente de bronce, la imagen central es de hecho la vara en la que Moisés cuelga la señal redentora de la serpiente de bronce.
Por lo tanto, las cuatro esquinas de la capilla más sagrada del cristianismo y las cuatro copas del Seder pascual han encontrado una voz común con la que proclamar el papel constante de Dios en los principales momentos de la historia. De ahí se decuce un simbolismo claro: toda la obra creadora de Dios reflejada en la bóveda se sostiene en las cuatro esquinas que ilustran la fe en la salvación divina.
