Simbolismo de la Vocación de los Apóstoles
El Redentor, representado como guía del pueblo reunido bajo la Nueva Ley, resalta en el centro al igual que Moisés en el recuadro de enfrente, con el que el paralelismo es, en este punto, más evidente. El paisaje, amplio y sereno, asume aquí un valor singular y nuevo: puesto que no sólo sirve de fondo al acontecimiento, sino que refleja también, en la tranquilidad de las aguas, la paz que emana del dulce rostro de Jesús.
La ciudad de Cafarnaúm se representa como una ciudadela fortificada del siglo XV. Entre todos los edificios hay uno que parece recordar el viejo San Pedro.
Las cuatro parejas de pájaros que vuelan en el cielo despejado, se identifican con la Alianza, que se repite cuatro veces significando las Cuatro noches de la tradición judeo-cristiana.